Después calabriacon la contratación de 500 trabajadores de la salud de Cuba, y apulia que contactó para reclutar médicos de Albania, también le tocó a él Siciliaque se convierte enArgentina. Y, a pesar del contrato, la bata blanca llegó desde Sudamérica para—Hospital ‘Longo’ en Mussomeli, en el área de Nisseno.
“Se sabe desde hace veinte años que la necesidad de médicos y de sanidad es insuficiente – dice el presidente de la orden de doctores Palermo Toti Amato, miembro del directorio de Fnomceo – y reconocemos que en una emergencia, se necesita una acción urgente para garantizar la salud de los ciudadanos. Pero es inaceptable que esto pueda suceder sin conversaciones y planes extraordinarios acordados entre la Región y las instituciones, que están involucradas de lleno en el proceso de certificación requerido para que los colegas extranjeros ejerzan la profesión en Italia”.
Para los nueve presidentes del orden provincial “una llamada al fusil de médicos extranjeros que parecen ser vetados por diversas instituciones públicas y privadas es una solución oportuna, la duración del contrato que retrasa problemas graves sin mirar en nuestras casas y saltándose cada regla ordinaria y extraordinaria en cuanto a la contratación en la atención de la salud Como escribe Il Foglio, en Calabria el salario que deja el gobierno cubano a los médicos que envía al extranjero como muestra de solidaridad por la crisis de la pandemia es de 70 euros, el resto va a el fisco de la dictadura”.
