CRÓNICAS – Argentina ha elegido a Javier Milei, un presidente ultraliberal. La reedición del libro de Philippe Nemo sobre el economista Friedrich Hayek es una oportunidad para comparar la tradición liberal y sus éxitos.
¿Es la elección de Javier Milei, nuevo presidente de Argentina, una mala noticia? Este cincuentón de actitud vulgar es un populista ultraliberal que quiere acabar con la tradición populista peronista. Tiene razón: el patrocinio estatal es un mal peligroso y destructivo. Pero ¿qué se entiende por populista ultraliberal? El populismo clásico es todo lo contrario. Prometió un estado de bienestar, proteccionismo económico y frenar las fuerzas rivales que frustraban la voluntad del pueblo. En Francia, esto se debe en parte al proyecto de Marine Le Pen (aumento del salario mínimo, reducción de la edad de jubilación, semicierre de fronteras, etc.).
En Argentina, el peronismo, promovido desde la década de 1950 por Juan y luego Evita Perón, ha formado un populismo nacional colorido, basado en muchos clientes seducidos por la generosidad del Estado. Esto se extiende mucho más allá de las parejas carismáticas. En 2000, bajo el liderazgo de Carlos Menem, otro peronista,…

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