Doha, Qatar) – Una fotografía con altos niveles de fantasía, clase y nostalgia: eso es todo tomada por Valentina Baggio para el padre Roberto y Alessandro Del Piero, en Qatar, horas antes de la final del Mundial entre Argentina y Francia. Uno le jugó, en Pasadena en 1994, tras escaparse como protagonista absoluto, ante una última vuelta ‘maldita’, disputada a pesar de una supuesta lesión en semifinales y que le limitó -demasiado- ante Brasil, en un partido que culminó con el famoso penalti que pateó a las estrellas. En cambio, otro lo ganó al anotar uno de cinco penaltis, concretamente contra la selección transalpina, en Berlín en 2006.
Baggio y Del Piero, ‘un reencuentro hecho por el Véneto’
Baggio y Del Piero, instantánea que emociona a todos aficionados de la Juventus y de la selección italiana pero, en general, cualquiera que se preocupe por el deporte: 290 goles del blanquinegro Alex, ganó todo lo que hay que ganar, 115 de las coletas más famosas de Italia, en solo cinco temporadas, con el Balón de Oro para engordar el currículum. En su cuenta de Instagram, al pie de la foto, Valentina escribió con orgullo: “Los venecianos del mundo… ¡Qué gusto oírte hablar en dialecto!“.
“Creador amigable con los hipsters. Gurú de la música. Estudiante orgulloso. Aficionado al tocino. Amante ávido de la web. Especialista en redes sociales. Gamer”.