Mangua, 13. Dos monjas costarricenses de la Congregación Dominicana de la Anunciación, Isabel y Cecilia Blanco Cubillo, quienes laboran en un hogar de ancianos, Fundación Colegio Susana López Carazo en la ciudad de Rivas, fueron expulsadas ayer de Nicaragua. Las dos monjas arribaron a Costa Rica ayer por la tarde.

La víspera, el gobierno de Managua había confiscado el convento de monjas trapenses, ubicado en San Pedro de Lóvago, Chontales, entregándolo al Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria, Inta. La monja trapense había salido del convento el 24 de febrero, llegando a Panamá al día siguiente. La congregación pertenece a la Orden de las Hermanas Cistercienses de la Estricta Observancia y llegó a Nicaragua procedente de Argentina el 20 de enero de 2001.

En julio de 2022, las Misioneras de la Caridad, fundadas por Santa Teresa de Calcuta, fueron expulsadas de Nicaragua luego de que la Asamblea Nacional anulara su personería jurídica.

Al inicio de la Semana Santa, el misionero claretiano panameño padre Donaciano Alarcón, expulsado por orar por monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, fue condenado a 26 años de prisión, desde el 9 de febrero en la cárcel tras ser detenido. bajo arresto domiciliario desde el 19 de agosto de 2022.

La comunidad católica está pasando una Semana Santa difícil: el presidente Ortega ha prohibido los ritos tradicionales; supuestamente se prohibieron más de tres mil procesiones y se detuvo a una veintena de personas.